La amenaza del terrorismo se ha reavivado en Europa, coincidiendo con una escalada en Oriente Próximo. A pesar de que desde 2015 la Unión Europea ha implementado diversas medidas en contra del avance del terrorismo de ISIS y de Al-Qaeda, la diversidad y falta de armonización entre los Estados Miembro podría entorpecer la seguridad nacional y regional.
La amenaza del terrorismo se ha reavivado en Europa, coincidiendo con una escalada en Oriente Próximo. El ataque perpetrado por Hamás en Israel el pasado 7 de octubre plantea la posibilidad de que los eventos vinculados al yihadismo durante los años 2015 y 2016 se repitan de nuevo dentro de la Unión Europea. Según un artículo del Real Instituto Elcano, organizaciones terroristas de alcance global, como Al-Qaeda y el ISIS, podrían intentar capitalizar el sentimiento de agravio e ira entre la población palestina y la comunidad musulmana en general, movilizando a sus seguidores y simpatizantes contra objetivos judíos en Europa. Esto se debe en parte al abierto respaldo de algunos países europeos, como Francia y Alemania, e incluso de la Unión Europea, al Estado de Israel en este conflicto.
Los recientes atentados en Francia, como el ocurrido en un instituto en Arrás o en Bélgica, que afectó a ciudadanos suecos en plena calle, subrayan la importancia de abordar la seguridad y la prevención del extremismo yihadista en la Unión Europea. Es cierto que desde 2015, la Unión Europea ha implementado diversas medidas con el fin de contrarrestar el terrorismo y la radicalización yihadista, sin embargo, los últimos acontecimientos evidencian que esta es una responsabilidad que debe ser reforzada de forma conjunta.
El terrorismo yihadista: qué es y que impacto ha tenido impacto reciente en Europa en los últimos años
El informe de la EUROPOL de The European Union (EU) Terrorism Situation and Trend Report (TE-SAT) 2022 define el yihadismo como una subcorriente violenta del salafismo. Además, apunta que es un movimiento dentro del Islam suní, que promueve una renovación religiosa. Los yihadistas poseen una aspiración fundamental: establecer un Estado islámico gobernado exclusivamente por la ley islámica (sharía), interpretada según sus propias creencias. Para la consecución de este fin los yihadistas justifican el uso de la violencia apelando a las doctrinas islámicas clásicas sobre la yihad. Los perpetradores consideran como una guerra religiosa. Por ello, todos aquellos que se oponen a sus interpretaciones de la ley islámica son percibidos como «enemigos del Islam» y, por lo tanto, son considerados objetivos legítimos.
En este contexto, se identifican como representantes del yihadismo a la red Al Qaeda y al grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (EI). Estos grupos han sido responsables de numerosos actos de violencia en Europa y en otras partes del mundo, lo que ha llevado a un profundo escrutinio y a esfuerzos significativos por parte de las autoridades para prevenir y combatir esta amenaza.
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Las cifras recopiladas en 2021 indican que el terrorismo yihadista sigue siendo la principal amenaza para la UE. Durante ese año, se informó de un total de 15 ataques terroristas. Estos incluyen tanto los que se llevaron a cabo con éxito como los que fueron frustrados o fallidos. De estos ataques, tres fueron perpetrados por terroristas yihadistas en Francia, Alemania y España y donde trágicamente, dos personas perdieron la vida.
A su vez, durante el transcurso de 2021, se llevaron a cabo un número significativo de investigaciones sobre sospechosos vinculados a organizaciones de naturaleza yihadista. Una gran parte eran individuos que formaban parte de organizaciones terroristas, a través de la difusión de propaganda. También son parte de la planificación y preparación de actos terroristas. El año concluyó con un total de 260 detenciones de sospechosos y la desarticulación de varios grupos sospechosos de estar involucrados en actos terroristas.
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Alerta terrorista en Europa a raíz del conflicto entre Israel y Hamás
Actualmente, el bloque europeo mantiene niveles preocupantes de riesgo por terrorismo. En parte provocado por la inseguridad en la región de Gaza e Israel. Sin embargo, debido a que los países miembros de la Unión son los que enfrentan en la primera línea de responsabilidad en lo que respecta a la seguridad nacional, cada uno de ellos tiene sus propios mecanismos para combatir la amenaza.
Además, también tienen diferentes indicadores para los distintos niveles de alerta. Algunos Estados hacen referencia a estos sistemas como niveles de alerta, mientras que otros utilizan el término grado de amenaza. Aquellos que no se basan en la categorización numérica o de colores optan por métodos alternativos. Algunos como la emisión de avisos a la población a través de comunicados o comparecencias de autoridades.
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París, en este sentido, se encuentra en el máximo riesgo con nivel «Emergencia por ataque». El conflicto en Oriente Próximo entre Israel y Hamás podría extenderse alterritorio francés. En Francia reside un 10% de población musulmana y la comunidad judía más significativa de Europa. De hecho, se han llevado a cabo operaciones de detención por actos antisemitas. Sobre todo, a través de la recepción por correo electrónico de amenazas de bomba. Varios avisos obligaron a las autoridades a desalojar seis aeropuertos el pasado 18 de octubre.
Sin duda, Francia está viviendo uno de los peores escenarios posible. Las cifras en su territorio alcanzan las 300 personas encarceladas por ser consideradas peligrosas, según el Ministerio del Interior de Francia. Los servicios de Inteligencia, por su parte, desactivan un atentado cada dos meses en el país.
Por su parte, Bélgica ha elevado el nivel de alerta al 3, «Amenaza grave», en una escala de 4; mientras que España anunció el refuerzo del nivel 4, vigente desde 2015, de 5 escalones de alerta terrorista, con por ejemplo, mayores medidas de seguridad en previsión de atentados y con vigilancias especiales en torno a 33 legaciones diplomáticas.
A continuación, una comparativa de los sistemas existentes de los países occidentales:
Si bien esto es cierto, la lucha contra la delincuencia transfronteriza y el terrorismo representa un reto común en el bloque europeo. Especialmente porque la disparidad entre estos sistemas puede ocasionar confusión a la hora de que los ciudadanos europeos comprendan sin filtros la situación actual. También puede incentivar la desinformación y dificultar la coordinación efectiva contra la inseguridad a nivel europeo.
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Principales mecanismos en la Unión Europea contra el terrorismo
Siendo consciente de ello, los miembros de la Unión comenzaron en décadas recientes a trabajar de forma conjunta en esta cuestión. Sobre todo tras el período posterior a los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos. A raíz de ello, surgieron los principales mecanismos antiterroristas, que aún hoy siguen vigentes y mejorándose.
En respuesta a este evento, la Unión Europea estableció una lista que enumeraba a personas, grupos y entidades vinculadas a actos terroristas. Estos estaban sujetas a medidas restrictivas, algo que por el momento permanece en constante revisión cada 6 meses.
Por otro lado, un impulso significativo en este ámbito se produjo después de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004 en Madrid. En aquel momento, los líderes de la UE aprobaron una declaración conjunta sobre la lucha contra el terrorismo. Entre las medidas acordadas, se decidió crear el puesto de Coordinador de la lucha antiterrorista de la UE. Entre sus objetivos destaca la coordinación de la estrategia antiterrorista en el bloque europeo y la mejora de la comunicación entre los miembros y países extranjeros colaboradores.
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En los últimos años, la radicalización de individuos, en especial dentro de la ideología yihadista, ha surgido como una amenaza de creciente gravedad. En gran parte debido al impacto de las tecnologías de comunicación en línea. Conociendo este riesgo, la Unión Europea adoptó una normativa específica dirigida a abordar la difusión de contenidos terroristas en línea. Paralelamente, las autoridades están recurriendo cada vez más a las pruebas electrónicas para identificar y procesar a los delincuentes. Estas tecnologías se han convertido en herramientas activas para planificar y llevar a cabo delitos relacionados con actos terroristas.
En este sentido, la Unión Europea está trabajando en la elaboración de nuevas normativas que permitan un acceso más eficaz a las pruebas electrónicas a nivel transfronterizo, especialmente para su uso en el contexto de procedimientos penales relacionados con delitos de terrorismo. Esta iniciativa es de suma importancia, dado el constante y rápido desarrollo tecnológico que es aprovechado de suma manera por estas organizaciones.
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Particularmente Internet ha facilitado la comunicación sin fronteras entre terroristas, lo que ha amplificado la propagación del extremismo ideológico. De hecho, el informe TE-SAT 2022 destaca que los actores solitarios continúan siendo los principales perpetradores de atentados terroristas y actos violentos en Europa, lo que subraya la persistente amenaza de la radicalización en la actualidad y su necesaria prevención dentro de las fronteras europeas.
Por otro lado, la Unión Europea ha implementado diversas medidas antiterroristas adicionales, incluyendo:
- La cooperación con organismos de seguridad como la Europol y Eurojust, que brindan apoyo a las autoridades nacionales en la colaboración de investigaciones y procedimientos judiciales en los Estados miembros. Un ejemplo de esta colaboración efectiva fue cuando Europol pudo acceder a los nombres de más de 4,500 terroristas detenidos en el noreste de Siria y los Estados pudieron incorporar la lista en el Sistema de Información de Schengen y así evitar su entrada en sus territorios.
- Cortar la financiación del terrorismo. Desde 2018, se han implementado normas más estrictas contra el blanqueo de capitales. Estas normas dificultan la ocultación de fondos ilegales y refuerzan los controles relacionados con terceros países considerados de alto riesgo (en términos de lavado de dinero).
- Control de armas de fuego. El Consejo Europeo aprobó en el año 2017 nuevas regulaciones relacionadas con el control de adquisición y posesión de armas de fuego consideradas altamente peligrosas. Asimismo, estas regulaciones también se enfocan en restringir la disponibilidad de precursores de explosivos para el público en general. De esta manera es más sencillo tomar identificar transacciones sospechosas para el suministro de armas y sustancias relacionadas.
- Directiva sobre la lucha contra el terrorismo. En marzo de 2017, la UE adoptó una Directiva destinada a fortalecer su marco legal en la prevención de actos terroristas y el abordaje del fenómeno de los combatientes terroristas extranjeros. Esta legislación proporciona una base sólida para prevenir actos de terrorismo y controlar el flujo de individuos que viajan al extranjero para unirse a grupos terroristas. Esto se debe a que entre 4000 y 5000 nacionales de la UE viajaron o intentaron viajar a zonas de conflicto, principalmente en Irak y Siria, desde 2011 hasta 2021 para unirse a grupos terroristas como el ISIS.
Estas medidas reflejan el compromiso de la Unión Europea en la lucha contra el terrorismo y su determinación en reforzar su marco legal y colaborativo para abordar esta amenaza de manera efectiva.
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¿Existe o no armonización entre los Estados Miembros de la Unión Europa a favor de la lucha contra el terrorismo?
El caso de Abdesalem Lassaoued, el terrorista que perpetró el ataque en Bruselas, demuestra que existe una falta de coherencia entre los miembros europeos. Una ausencia motivada principalmente por los agujeros existentes en los sistemas de intercambio de información de la Unión Europea. Según los hechos, este «lobo solitario» habría sido rechazado en tres países de la Unión en cuestiones de asilo. Además, estaba fichado por tener vínculos con el radicalismo.
Una comunicación eficaz entre las autoridades policiales, judiciales y de Inteligencia de los Estados miembros se presenta como un elemento crítico en la lucha contra el terrorismo. Por consiguiente, la Unión Europea ha adoptado una serie de medidas destinadas a mejorar esta cooperación, destacando las siguientes:
- La implementación de un marco de interoperabilidad entre los sistemas de información de la UE. Este está orientado a la gestión de fronteras, seguridad y migración, en 2019.
- La actualización del Sistema de Información de Schengen. Este lo utilizan las fuerzas policiales y las autoridades de control fronterizo para compartir alertas relacionadas con individuos y objetos buscados o desaparecidos. Está en marcha desde 2018.
- La promulgación de la Directiva sobre el registro de nombres de los pasajeros en 2016. Esta regula la transferencia y el tratamiento de datos personales proporcionados por los pasajeros aéreos.
- La creación de un Centro Europeo de Lucha contra el Terrorismo en Europol en 2016. Está destinado a apoyar el intercambio de información entre las autoridades policiales nacionales.
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Además, los Estados miembros de la Unión Europea han establecido mecanismos que les permiten otorgarse acceso mutuo a través de las fronteras a bases de datos específicas, incluyendo aquellas que contienen información de ADN, huellas dactilares y registros de vehículos.
En consecuencia entre 2015 y 2019, el número de personas vinculadas al terrorismo en la base de datos de Europol aumentó un 267%. Lo que ayuda en gran manera a la identificación y detención de sospechosos vinculados al yihadismo.
Futuro y prospectiva sobre el terrorismo en la Unión Europea
En relación con los recientes atentados, se vislumbra la posibilidad de que se impulse un nuevo Pacto Migratorio que tenga por consecuencia dificultar la entrada de inmigrantes en las fronteras europeas. Los Veintisiete han estado debatiendo durante varios meses sobre esta nueva legislación, siendo un objeto de bloqueo el retorno de los migrantes irregulares. En octubre de 2023, Ylva Johansson, Comisaria de Interior de la Comisión Europea, informó que de las 400,000 órdenes de expulsión emitidas ese año en la Unión Europea, solo se ejecutaron 65,000 (un 16.25%).
El elevado número de intentos de ataques terroristas y los actos cometidos ha intensificado la presión sobre el Parlamento Europeo para abordar de manera más rigurosa la expulsión de inmigrantes irregulares. También ha reforzado el seguimiento de individuos extranjeros vinculados a la radicalización y el extremismo. Esto es especialmente relevante dado que los autores de los ataques en Bruselas y Francia eran extranjeros monitoreados por las autoridades. Por ejemplo, en el caso del ataque en Bruselas, el perpetrador era un tunecino radicalizado que había estado vagando en la Unión Europea durante 12 años sin que se le hubiera concedido asilo en ningún país.
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Aun así, podemos esperar una mejora en las herramientas que permitan a las autoridades acceder de manera más efectiva a la información compartida. La Unión Europea es consciente de las deficiencias en este sentido, ya que las bases de datos nacionales utilizadas para el control de fronteras y la lucha contra el crimen organizado no se comunican entre sí.
Por lo tanto, podemos prever un impulso en el plan de la Unión para conectar todas estas bases a través de herramientas como el portal de búsqueda de la Unión, la detección múltiple de individuos, el repositorio común de identidad y el servicio común de datos biométricos. Esto permitirá un flujo más eficiente de información, mejor detección de amenazas, combate contra el fraude de identidad, mejora en los controles fronterizos y prevención de lagunas en la información.
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