El martes 11 de abril el Gobierno ruso ha puesto en marcha una maniobra militar a gran escala en el Ártico para asegurar la seguridad de las actividades que Rusia está llevando a cabo en la región.
Según ha informado la agencia de noticias rusa Interfax, en las maniobras participarán 1.800 soldados, 85 equipos militares, 40 aviones y 15 embarcaciones.
La misión podría durar varios días en lo que se verificará la compenetración de los militares rusos. El Ártico es considerado un lugar clave para Rusia por ser el paso de exportación de materias primas procedentes del norte del país.
Estas actividades estratégicas rusas tienen lugar después de que el pasado 4 de abril Finlandia se convirtiera en el miembro número 31 de la OTAN. La continua expansión de la Alianza hacia el este ha sido una de las constantes preocupaciones para el Kremlin.
