Tras el atentado de Moscú del pasado 22 de marzo de 2024, las miradas se han posado sobre el grupo terrorista ISIS-K, una ramificación violenta y extremista del grupo terrorista ISIS. Desde LISA News, te contamos todo lo que debes saber sobre la organización: desde su historia, líderes y financiación.
Su nombre completo, Estado Islámico Khorasan, hace referencia a la región histórica del Jorasán, en la que operan principalmente. Esta zona abarca partes de lo que hoy es Afganistán, Pakistán, Irán, Turkmenistán y Uzbekistán, siendo el foco de continuos atentados con el fin de establecer su dominio en esta área. Se caracterizan por pertenecer a los sunitas, la rama mayoritaria del Islam y desdeñan explícitamente a los chiitas, mayoría en Irán.
Historia y expansión del ISIS-K
Inicialmente, el ISIS-K se estableció como una entidad afiliada al ISIS original, compartiendo su ideología radical y su objetivo de establecer un califato islámico. En 2015, con la adquisición de extensas franjas de terreno en Oriente Medio y el crecimiento de la organización, la escisión se independiza, consolidándose como una entidad autónoma. Todo ello, sin perder sus vínculos ideológicos y operativos con el ISIS original.
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En los años posteriores, el ISIS-K comenzó a expandir su presencia, aprovechando los conflictos e inestabilidad regional. Según el Centro de Estudios Estratégicos Internacionales, se produce la intensificación de atentados terroristas en Afganistán y Pakistán, siendo responsable, en enero de 2017, de casi 100 ataques contra civiles y fuerzas de seguridad. Este grupo representó una amenaza significativa para la seguridad nacional en estos dos Estados.
En 2021, tras la caída del régimen talibán en Afganistán, el ISIS-K aprovechó el vacío de poder y la inestabilidad resultante para aumentar sus actividades. Sin embargo, a pesar de compartir raíces ideológicas y con la reciente adquisición del poder, los talibanes se comprometieron a evitar que grupos terroristas como Al Qaeda o ISIS-K utilizaran su territorio como base de operaciones para la consecución de atentados y ataques contra Estados Unidos y sus aliados.
En los últimos años, la ramificación del Estado Islámico ha disminuido según los informes de las Naciones Unidas, contando en 2020 con tan solo 2.200 combatientes en Afganistán, después de sufrir derrotas a manos de las fuerzas estadounidenses y afganas en la provincia de Nangarhar, en el noreste del país.
Principales atentados terroristas del ISIS-K
A pesar de sus condiciones, siguen perpetrando mortíferos atentados en Oriente Medio. En 2021, un ataque suicida en el aeropuerto de Kabul durante la evacuación estadounidense del país se cobró la vida de más de 170 personas, la mayoría civiles. En ese mismo año, el ataque bomba en una escuela de la capital afgana causó la muerte de 80 adolescentes, aumentando su historial de ataques. De igual modo, Estados Unidos interceptó comunicaciones que confirmaban bombardeos gemelos en Irán realizados por este grupo, calificándolo de amenaza continua con posibilidad de cometer ataques terroristas fuera de las fronteras afganas, suponiendo un peligro para la sociedad internacional.
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El último atentado se reivindicó el pasado 22 de marzo de 2024 con el ataque al Crocus City Hall en Rusia. Si bien supuso una escalada dramática, aumentando la propaganda mediática en plena guerra contra Ucrania, expertos como Colin Clarke del Soufan Center especifican que el ISIS-K se ha opuesto al presidente ruso Vladímir Putin en sus comunicados al mantener en sus filas combatientes con sus propias quejas contra Moscú.
¿Cuáles son los líderes y alianzas del ISIS-K?
El Estado Islámico de Jorasán tiene una estructura organizativa similar a la de la organización central. Su liderazgo se compone de una jerarquía que incluye un líder supremo, un consejo consultivo y los comandantes en el terreno. No obstante, debido al carácter clandestino en el que operan, los líderes pueden cambiar con el tiempo a raíz de las operaciones militares y la presión de las fuerzas de seguridad.
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Entre sus principales líderes destacó Abdul Rehman Al-Loghr, al que se le atribuyeron numerosos atentados terroristas, entre el que se encuentra el golpe suicida en el aeropuerto de Kabul. Fue abatido en 2017 en una operación conjunta de las fuerzas afganas y estadounidenses en la provincia de Nangarhar, constituyendo un duro golpe para la organización. Actualmente, se encuentra al mando Shahab al-Muhajir, activo en la región de Jorasán.
¿Cómo se financia el ISIS-K?
El grupo ISIS-K utiliza métodos de financiación similares a los del grupo matriz, a través de actividades ilícitas. En primer lugar, participa en el tráfico de drogas, concretamente de opio y heroína que cultivan en Afganistán y Pakistán, controlando las rutas de contrabando y cobrando impuestos a los traficantes de la región. Asimismo, se dedican a la extorsión de empresas locales, comerciantes y las áreas bajo su control, imponiendo impuestos a la población local y agricultores a cambio de protección o en forma de permiso para operar en su territorio.
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De igual modo, también utilizan el tráfico de personas para obtener beneficios a través de rescates, siendo conocido por secuestrar a trabajadores humanitarios, periodistas y civiles extranjeros en la región y exigir grandes sumas de dinero para su devolución. Por último, y en menor medida, recibe donaciones de simpatizantes y partidarios de su ideología extremista en todo el mundo. Estas donaciones pueden provenir de individuos, organizaciones o incluso estados que comparten sus objetivos ideológicos, a través del uso de criptomonedas difíciles de rastrear o en efectivo. Además de dinero en efectivo, el ISIS-K recibe donaciones en forma de bienes materiales, como armas, equipos o suministros, que pueden ser utilizados para apoyar sus operaciones.
Proceso de reclutamiento del ISIS-K
Tienen diversas formas de captación de objetivos, predominando la propaganda y reclutamiento en línea a través de las redes sociales y plataformas en línea para difundir su ideología radical y adquirir nuevos miembros. Publican videos y mensajes que promueven la causa y llegan a una audiencia más alta para atraer a individuos vulnerables susceptibles a su mensaje extremista. Utilizan plataformas como Dailymotion, Signal o Telegram, al proteger más el anonimato de las personas y ser más difíciles de rastrear.
Por otro lado, en algunas áreas, los miembros del ISIS-K, llevan a cabo actividades de reclutamiento con contacto directo y bajo la promesa de obtención de estatus y beneficios como dinero y poder. Normalmente, se realiza con intermediarios locales y entre familiares, amigos y conocidos que compartan su ideología.
