El operativo «Triángulo Criminal» desarticuló una red criminal que se dedicaba al tráfico internacional de droga, con la colaboración de elementos del cartel mexicano «Jalisco Nueva Generación» y tres elementos del ejército.
El Ministerio Público de Guatemala, a través de la Fiscalía de Delitos de Narcoactividad, realizó el operativo denominado “Triángulo Criminal” consistente en 33 diligencias de allanamiento, inspección y registro en los departamentos de Guatemala, Petén, Retalhuleu, Escuintla, Sacatepéquez y Alta Verapaz.
Según informó el Ministerio Público en un comunicado, el operativo deriva de una investigación realizada desde 2018 y se desarrolló en coordinación con diversas unidades de la Policía Nacional Civil, Ministerio de Gobernación y Ministerio de la Defensa Nacional.
La Fiscalía de Delitos de Narcoactividad, requirió ante juez competente 21 ordenes de aprehensión por los delitos de: asociaciones delictivas, comercio, tráfico y almacenamiento ilícito, conspiración para el asesinato, entre otros.
Modus operandi de la organización criminal
Dentro de las personas involucradas y a quienes se les giró orden de aprehensión se encuentran 3 elementos del ejército, quienes colaboraron con dicha organización. Estos se encargaban de asegurar la comisión de los hechos delictivos concertados, aprovechando la información privilegiada a la que tenían acceso, para orientar las acciones de la organización criminal o retrasar los movimientos para la interdicción de las aeronaves ilegales.
Uno de ellos operaba desde el comando aéreo de la Fuerza Aérea, el segundo desde una de las bases de Petén en donde se da la mayor cantidad de trazas ilícitas aéreas y el tercero desde una de las bases de Retalhuleu y otras áreas del sur del país.
Según los resultados de la investigación realizada por la Fiscalía de Delitos de Narcoactividad, esta estructura criminal coordinaba las planificaciones para la recepción de aeronaves cargadas de droga denominada cocaína, procedentes de otros países principalmente de Suramérica, en colaboración con elementos del cartel mexicano denominado “Jalisco Nueva Generación”.
El modo de operar de dicha estructura consistía en localizar pistas de aterrizaje clandestinas, para utilizarlas para el aterrizaje de aeronaves cargadas con droga, coordinar la búsqueda de personas para la descarga y traslado de la droga.
Asimismo, coordinaban a diferentes personas para bloquear el paso a las fuerzas de seguridad pública, evitando que llegaran al lugar donde se cometía el ilícito o lugar del aterrizaje de aeronaves. Además, se logró determinar que amenazaban y planificaban atentados en contra de personas que pudieran delatarlos con las autoridades.
Uno de los hechos atribuidos a esta organización a imputar por la Fiscalía son los 200 paquetes que se incautaron en un vehículo el pasado 5 de noviembre de 2021. El Ministerio Público reiteró su compromiso en la persecución penal a este tipo de estructuras criminales y aseguró que seguirá realizando «acciones de combate y lucha frontal» contra organizaciones dedicadas al narcotráfico en el país.