Juez designado por Trump ordena restaurar acceso a periodistas vetados por usar ‘golfo de México’. El fallo judicial confirma que la Casa Blanca no puede discriminar a medios por cuestiones terminológicas. Associated Press celebra la decisión que reafirma la libertad de prensa frente a las represalias gubernamentales.
El juez federal Trevor McFadden ha ordenado al Gobierno de Estados Unidos restaurar el pleno acceso de la agencia Associated Press (AP) a la Casa Blanca para cubrir los eventos del presidente Donald Trump. Esta decisión preliminar representa un revés para la Administración, que había vetado indefinidamente a los periodistas de AP del Despacho Oval y del avión presidencial ‘Air Force One’ desde mediados de febrero. El magistrado, designado por Trump durante su primer mandato, fundamentó su decisión en la Constitución, argumentando que esta «prohíbe la discriminación por opiniones, incluso en un foro privado como el Despacho Oval». En su escrito de 41 páginas, McFadden aclaró: «Eso es todo lo que ordena el TRIBUNAL hoy: que el Gobierno ponga a AP en igualdad de condiciones que a otros medios en situaciones similares, a pesar del uso de terminología desfavorable por parte de la agencia».
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El origen de esta disputa se remonta a la decisión de la Casa Blanca de prohibir el acceso de los periodistas de AP a sus instalaciones por mantener el uso de la denominación ‘golfo de México’, después de que Trump rebautizara este accidente geográfico como ‘golfo de América’. En su fallo, el juez McFadden precisó que «el tribunal no ordena al Gobierno conceder a AP acceso permanente al Despacho Oval, la Sala Este ni a ningún otro evento mediático. No le otorga un trato especial». Sin embargo, añadió que la agencia «tampoco puede recibir un trato peor que el de sus homólogas agencias de noticias», dictaminó.
No se puede prohibir por cuestiones editoriales
McFadden declaró que las autoridades no pueden «cerrar las puertas a periodistas debido a sus puntos de vista», una práctica que atribuye a la Administración Trump en este caso, ya que «no ofrece ninguna otra explicación creíble para su trato a AP». Esta sentencia subraya la protección constitucional de la libertad de prensa frente a posibles represalias gubernamentales por cuestiones editoriales, como la elección de terminología geográfica en este caso particular.
La portavoz de Associated Press, Lauren Easton, expresó su satisfacción con la decisión judicial en un comunicado: «Nos complace la decisión del magistrado porque reafirma el derecho fundamental de la prensa y el público a expresarse libremente sin represalias del gobierno». Easton añadió que «esta es una libertad garantizada para todos los estadounidenses en la Constitución de Estados Unidos. Esperamos seguir ofreciendo una cobertura objetiva, imparcial e independiente de la Casa Blanca a miles de millones de personas en todo el mundo». No obstante, la portavoz lamentó que la empresa «ha estado sufriendo una hemorragia económica durante los últimos dos meses» como consecuencia del veto impuesto por la Casa Blanca.
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