Arabia Saudí aspira a aprovechar el tirón del mundial de fútbol 2034 para convertir su liga como una de las mejores del mundo. Hasta su celebración, tendrá varios años donde potenciará mediante grandes inversiones milmillonarias sus estadios y equipos para atraer a grandes jugadores.
La FIFA confirmó a Arabia Saudí como sede de la Copa Mundial de Fútbol 2034, siendo el único país que presentó la candidatura y el segundo que se celebrará en Oriente Medio tras Qatar 2022. Esta decisión se enmarca en la estrategia del reino para diversificar su economía dependiente del petróleo y mejorar su imagen internacional. Sin embargo, esta elección ha generado grandes críticas por parte de organizaciones de derechos humanos, que denuncian la represión de activistas, la falta de libertad de expresión, la discriminación contra las mujeres y la comunidad LGBTI y las pésimas condiciones laborales de los trabajadores migrantes que construirán los nuevos estadios. Estas organizaciones argumentan que la FIFA no ha exigido garantías suficientes en materia de derechos humanos antes de otorgar la sede del Mundial, y temen que el evento pueda contribuir a violaciones de derechos humanos.
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Pese a las críticas, la organización del Mundial 2034 se alinea con el plan Visión 2030 del gobierno saudí. Este plan busca reducir la dependencia económica del petróleo y promover otros sectores, como el futbolístico, el turístico y el entretenimiento. El objetivo es invertir en sectores que les permitan ser relevante en el escenario mundial. Este evento deportivo se considera la oportunidad perfecta para reforzar el soft power (poder blando) de Arabia Saudí, mejorar su influencia global y consolidarse en estos sectores. Para ello, el país de Oriente Medio ha invertido miles de millones de dólares para potenciar su influencia deportiva. Además, el gobierno saudí ve en el Mundial una plataforma de exposición mundial para mostrar los cambios y la modernización del país. Sin embargo, los escépticos argumentan que se trata de un intento de «lavar» su imagen internacional sin abordar las preocupaciones sobre derechos humanos.
Vía libre para Arabia Saudí
La decisión para designar a Arabia Saudí como anfitrión del mundial 2034 se tomó en un congreso extraordinario de la FIFA. La candidatura saudí se aprobó por aclamación al ser la única propuesta presentada. El proceso de selección se desarrolló en un plazo inusualmente corto de 26 días, siguiendo el principio de rotación de confederaciones establecido por la FIFA. Tras quitarse la FIFA del medio a Conmebol, UEFA y la Confederación Africana de Fútbol en el mundial 2030 y recibir el apoyo de la Confederación Asiática de Fútbol en un mundial que estaba previsto celebrarse en Australia, Arabia Saudí tuvo el camino perfecto para acoger el evento más importante del fútbol en la misma región en 12 años.
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El país planea utilizar 15 estadios distribuidos en cinco ciudades para los 104 partidos del torneo: Riad, Yeda, Khobar, Abha y la futurista NEOM. El proyecto más ambicioso es el estadio King Salman Stadium en Riad, con una capacidad estimada para 92 mil espectadores, que se espera esté terminado en 2029 y que albergará los partidos inaugural y final. Esta será la primera Copa Mundial con 48 equipos que se celebrará en un solo país, ya que la edición de 2030 será multisede (Uruguay, Argentina, España, Portugal y Marruecos). Además, se han planteado dudas sobre la capacidad de Arabia Saudí para albergar un evento de esta magnitud durante el abrumante calor del verano en ese territorio. Sin embargo, la federación saudí ha insistido en su plan de celebrar el torneo en esa época del año y no en invierno, como sucedió con Qatar 2022.
Saudi Vision 2030
El Plan Visión 2030 de Arabia Saudí es una estrategia gubernamental diseñada para transformar la economía y la sociedad del país y cambiar el panorama de varios sectores a nivel mundial. Su objetivo es reducir la dependencia del petróleo y diversificar las fuentes de ingresos. El proyecto se lanzó en 2016 por el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, y el plan abarca inversiones millonarias de su fondo público en diversos sectores como el deporte, la tecnología, el turismo, las energías renovables y el entretenimiento. Los objetivos principales incluyen aumentar la participación del sector privado en la economía, desarrollar industrias no petroleras, atraer inversiones extranjeras y crear oportunidades de empleo para la población saudí. Además, busca modernizar la sociedad, promoviendo la mejora del mundo laboral y mejorando la calidad de vida de los ciudadanos.
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En el marco de esta visión de desarrollo, el gobierno saudí ha identificado el deporte, y particularmente el fútbol, como un sector estratégico para impulsar su economía y mejorar su imagen internacional. La inversión masiva en la liga local de fútbol, con la captación de estrellas internacionales mediante salarios elevados, forma parte de esta estrategia. Este objetivo busca no solo elevar el perfil de la liga saudí a nivel mundial, sino también desarrollar la industria del entretenimiento deportivo en el país, crear empleos en sectores relacionados y atraer grandes patrocinadores y turismo deportivo mediante partidos de fútbol de gran envergadura. Además, el fortalecimiento de la liga de fútbol se alinea con los objetivos de diversificación económica y desarrollo del sector privado, al tiempo que proyecta una imagen de modernidad y apertura que Arabia Saudí busca promover como parte de su transformación económica y social.
Inversión en el fútbol local
La liga de fútbol de Arabia Saudí ha experimentado una gran transformación en los últimos años, impulsada por una inversión masiva destinada a elevar su perfil a nivel mundial. Esta estrategia se ha centrado en convencer a leyendas y contratar a jugadores de renombre internacional, con la misión de aumentar el interés, el enriquecimiento y la competitividad de la liga. El fichaje más destacado ha sido el de Cristiano Ronaldo por el Al-Nassr en diciembre de 2022, con un contrato que incluye un salario estimado de más de 200 millones de euros por temporada.
La inversión en la liga saudí no se ha limitado a Ronaldo. Otros clubes han seguido esta tendencia, como el Al-Hilal, que fichó a Neymar, exjugador del Paris Saint-Germain y del Barcelona, o la incorporación de Benzema. Estos movimientos han generado un interés mundial sin precedentes en la liga saudí, atrayendo la atención de aficionados y medios de comunicación internacionales. Los clubes saudíes han demostrado su capacidad para competir financieramente con las principales ligas europeas, ofreciendo contratos lucrativos a jugadores de élite. Esta estrategi busca mejorar el nivel de juego en la liga local y posicionar a Arabia Saudí como un destino atractivo para el fútbol de alto nivel, en línea con los objetivos más amplios del país de diversificar su economía y mejorar su imagen global a través del deporte.
Capaz de atraer talento mundial
A pesar de las inversiones masivas en su liga local y la adquisición de estrellas internacionales, Arabia Saudí aún no ha logrado desafiar la hegemonía del fútbol europeo en términos de calidad y atractivo global. Esto ocurre porque la Saudi Pro League se mantiene de momento por debajo del nivel de las principales ligas europeas y algunas competiciones sudamericanas en cuanto a calidad de jugadores. Sin embargo, el poder financiero saudí ha demostrado ser capaz de atraer talento de alto nivel y de convencer a jugadores que están en una edad óptima para desempeñarse deportivamente.
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Esto podría sentar las bases para un cambio a largo plazo en el equilibrio del fútbol mundial en el que Arabia Saudí pueda llegar a superar a Europa. Esta estrategia, similar a la empleada en otros deportes como la Fórmula 1, expone como Arabia Saudí se posiciona y luego ejecuta para desafiar la dominancia europea en el deporte, aprovechando su capacidad económica para desarrollar gradualmente su infraestructura y atraer más talento internacional. De cara al mundial 2034, tiene un largo camino por delante que le permitirá establecer un plan para su fútbol local.
Estadios de vanguardia
Arabia Saudí planea construir 15 estadios de última generación para el Mundial de Fútbol de 2034, distribuidos en cinco ciudades: Riad, Yeda, Al Khobar, Abha y NEOM. De estos, 11 serán completamente nuevos, destacando el Estadio Internacional Rey Salman en Riad, con capacidad para 92.760 espectadores, que albergará el partido inaugural y la final. Estas construcciones ejemplifican la ambición del país por crear infraestructuras deportivas equipadas con las últimas modernidades que permitan diferenciarse y mejorar a cualquier otra sede en el mundo. Muchos de estos estadios contarán con techo retráctil, un terreno de juego transformable, diseños transformadores e iluminaciones modernas.
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Los nuevos estadios incorporarán también tecnologías avanzadas para ofrecer experiencias inmersivas a los espectadores. Por ejemplo, podrán transformarse rápidamente para albergar diferentes tipos de eventos, desde partidos de fútbol hasta conciertos y representaciones teatrales. Además, contará con sistemas para interacciones virtuales entre aficionados y celebridades, y transmisión instantánea de datos del evento en directo. La sostenibilidad también es un factor clave para el gobierno saudí, con innovaciones como un lago de refrigeración ecológica bajo el estadio que utilizará agua pluvial para el sistema de aire acondicionado. Estos avances tecnológicos y arquitectónicos buscan cumplir con los requisitos de la FIFA y posicionar a Arabia Saudí como un referente en infraestructuras deportivas modernas.
Integrarse en la liga saudí
Estos recintos, distribuidos en cinco ciudades, podrían integrarse posteriormente en la infraestructura de la Saudi Pro League. Sin embargo, esta transición presenta desafíos en la actualidad. Esto se debe a que actualmente la asistencia promedio a los partidos de la liga saudí es de menos de 10 mil espectadores por encuentro. La incorporación de estos estadios de gran capacidad a la liga local podría formar parte de una estrategia a largo plazo de las autoridades saudíes para aumentar el interés y la asistencia al fútbol local. Esta iniciativa se alinea con el plan Vision 2030 del país. No obstante, el éxito de esta transición dependerá de la capacidad para mantener y utilizar eficientemente estas instalaciones una vez concluido el Mundial, así como de lograr un crecimiento sostenido en la popularidad y el interés de esta liga.
Los 15 estadios del mundial 2034
Estadio Internacional Rey Salman
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 92.760 espectadores
Estadio Príncipe Mohammed bin Salman
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 46.979 espectadores
Estadio Rey Fahad
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 70.200 espectadores
Estadio Rey Abdullah
- Ubicación: Yeda
- Capacidad: 58.432 espectadores
Estadio NEOM
- Ubicación: NEOM
- Capacidad: 46.010 espectadores
Estadio Universitario Rey Khalid
- Ubicación: Abha
- Capacidad: 45.428 espectadores
Estadio Aramco
- Ubicación: Al Khobar
- Capacidad: 46.096 espectadores
Estadio Qiddiya Coast
- Ubicación: Yeda
- Capacidad: 46.096 espectadores
Estadio Jeddah Central Development
- Ubicación: Yeda
- Capacidad: 45.794 espectadores
Estadio Ciudad Económica Rey Abdalá
- Ubicación: Yeda
- Capacidad: 45.700 espectadores
Estadio Universitario Rey Saud
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 46.319 espectadores
Estadio de Murabba
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 46.010 espectadores
Estadio de la Ciudad Deportiva Príncipe Faisal bin Fahad
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 46.865 espectadores
Estadio ROSHN
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 46.000 espectadores
Estadio South Riyadh
- Ubicación: Riad
- Capacidad: 47.060 espectadores
Mundial 2034 como posible consolidación
La designación de Arabia Saudí como sede de la Copa Mundial de la FIFA 2034 ofrece al país una oportunidad única para consolidar su liga de fútbol como una de las más competitivas a nivel global. Este evento coincide con los esfuerzos del reino para desarrollar su infraestructura deportiva y atraer talento internacional a su liga local. La inversión masiva en nuevos estadios con diseños modernos y tecnología avanzada ejemplifica el compromiso del país por crear instalaciones de primer nivel. Además, la construcción multitud de estadios nuevos para el Mundial demuestra la ambición de Arabia Saudí por contar con una red de infraestructuras deportivas modernas y de alta calidad. Luego, estas instalaciones podrían aprovecharse para su potenciada liga local.
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El Mundial 2034 servirá como escaparate para mostrar estos avances en infraestructura y la evolución de la liga saudí. Esto permitirá a jugadores interesarse para fichar por alguno de estos equipos. Con cinco ciudades anfitrionas, incluyendo la futurista NEOM, Arabia Saudí tiene la oportunidad de presentarse como un destino atractivo para el fútbol de élite y eliminar esa barrera de la calidad que solo tiene con Europa. La inversión en la liga local, que ya ha atraído a estrellas internacionales, podría intensificarse en los años previos al Mundial. Esto podría mejorar el nivel competitivo y el atractivo global de la competición. Este desarrollo, combinado con la exposición internacional que proporcionará el Mundial, podría posicionar a la liga saudí como un referente en el fútbol mundial. Además, podría ofrecer un nivel de juego y espectáculo deportivo capaz de competir con las ligas más prestigiosas del mundo.
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