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¿Cómo es el perfil del ciberdelincuente?

Análisis

Nerea de Pedro Baena
Nerea de Pedro Baena
Manager de LISA Comunidad. Periodista especializada en política social, comunicación psicológica y salud mental.

poder establecer unas características comunes de las personas que cometen delitos en el ciberespacio sería especialmente útil para poder prevenirlos. En este artículo profundizamos sobre el perfil de los ciberdelincuentes.

En las últimas décadas, como consecuencia de un mundo cada vez más globalizado y dependiente de Internet, no solo ha aumentado el número de usuarios en la red, sino también los ciberdelitos. Solo en España, se cometen cuarenta ciberdelitos por segundo. Un ciberdelito, como su propio nombre indica, hace referencia a un acto ilegal que se comete en el entorno digital. No obstante, ¿quién está detrás de los ciberdelitos?

El poder establecer un perfil y unas características comunes de los ciberdelincuentes sería especialmente útil para prevenir estos ataques cibernéticos. Por ello, en la última década, las autoridades e instituciones expertas en ciberseguridad han señalado la ciberdelincuencia como un problema relevante y que cada día afecta a más personas.

La Organización de las Naciones Unidas abordó esta problemática en el XII Congreso sobre ‘’Prevención del Delito y Justicia Penal’’ y estableció que no existía un perfil común debido a las características tan heterogéneas del ciberdelincuente.

Predominio del perfil masculino entre los ciberdelincuentes

A pesar de la complejidad de establecer un perfil concreto del ciberdelincuente, todas las investigaciones y estudios llevadas a cabo han llegado a una conclusión común: existe un predominio claro del perfil masculino.

Empresas expertas en ciberseguridad como Digiware han desarrollado estudios a gran escala en América Latina y han podido acotar algo más las características de los delincuentes digitales. Se trata, en su mayoría, de hombres de entre 14 y 50 años. Por su vulnerabilidad, normalmente los delitos están dirigidos hacia menores. También la ONU, en uno de sus informes señaló que la media de edad en los ciberdelincuentes estaba en torno a los 35 años y que un 70% son hombres.

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En España existe muy poca investigación acerca de la ciberdelincuencia según datos del Sistema Estadístico de Criminalidad del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría del Estado de Seguridad, el 76% de los detenidos por delitos en la red son hombres de nacionalidad española y el principal delito que se comete es contra la libertad e indemnidad sexual’.

Aislamiento y superioridad: algunos rasgos de los ciberdelincuentes

Según Jesús P. López, director del bufete Abogado Amigo y experto en casos de ciberdelincuencia, los ciberdelincuentes se caracterizan por un sentimiento de superioridad en la mayoría de los casos. Confían en sus capacidades y en que no pueden ser descubiertos por las autoridades. “La frase más repetida es ‘a mi no pueden pillarme’”, añade el CEO de Abogado Amigo en unas declaraciones concedidas al periódico 20 minutos.

A pesar de la imagen que algunas películas han plasmado sobre los ciberdelincuentes, suelen ser personas con bastante autoestima y seguras de sí mismas. Tampoco cumplen las características estéticas que se describen en los libros o en la pantalla grande, a excepción de algunos grupos de criminales que utilizan distintivos específicos a modo de sello personal.

Esta sensación de superioridad y seguridad radica del aislamiento de los ciberdelincuentes en sus lugares de actuación, es decir, no necesitan mantener contacto físico con la víctima para cometer un delito sobre ella. Pero esto no tiene nada que ver, una vez más, con el prototipo de ciberdelincuente que carece de habilidades sociales y que no es capaz de relacionarse socialmente. No se ha establecido una relación entre patologías o trastornos de la personalidad y este tipo de criminales.

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Por lo general, son personas formadas de forma autodidacta. Aprenden a navegar por la red y a delinquir a través de páginas webs, blogs o foros, por lo que, aunque en la mayoría de los casos son personas con conocimientos no suelen haber recibido formación profesional. No existe una relación entre el nivel educacional y el perfil de los ciberdelincuentes. Sin embargo, según los expertos, suelen ser personas dispuestas a aprender pero, normalmente, a través de medios no convencionales.

Motivaciones personales y económicas de los ciberdelincuentes

De la misma forma que establecer un perfil psicológico general de los ciberdelincuentes es complejo, los motivos que llevan a estas personas a delinquir también varían. Por un lado, muchos de estos delincuentes comenzaron motivados por una curiosidad o como una forma de desafiarse personalmente y ver hasta dónde pueden llegar. No obstante, no todos los comienzos se producen de forma tan “casual”. Existen ciberdelincuentes que motivados por un conflicto del pasado o ideologías extremistas, recurren a los ataques digitales como forma de venganza.

Como consecuencia de su presencia en la red, muchos ciberdelincuentes acaban posicionándose de alguna forma acerca del sistema económico y político de su lugar de residencia. Por lo general, suelen ser críticos con los salarios y las rentas, considerando que no son suficientes para ellos.

¿Qué tipos de ciberdelincuentes existen?

Marcus Rogers, psicólogo y experto en el comportamiento de los hackers, clasificó en su obra The Psychology of Hackers: The Need for a New Taxonomy cinco modelos de ciberdelincuentes que pueden ayudar a entender los tipos de perfiles existentes:

  • Toolkit/newbies y scriptkiddies: novatos en el uso de la tecnología, con algunas habilidades técnicas y conocimientos muy bajos; suelen utilizar un software ya preparado.  
  • Cyberpunks: capaces de escribir programas pequeños, que utilizan principalmente para alterar páginas web, enviar correos spam, realizar actos vandálicos en el ciberespacio, etc.  
  • Internals: empleados o ex empleados de una organización o empresa. Dañan el sistema de la compañía por venganza. Sus ataques no se basan en habilidades técnicas, sino en su conocimiento preciso del nivel y tipo de seguridad presente dentro de la organización.  Coders (codificadores): que escriben códigos destinados exclusivamente a dañar otros sistemas.  
  • Old-guard hackers: piratas informáticos que siguen los preceptos de la primera generación de hackers, también llamados true hackers o piratas informáticos auténticos, altamente calificados, sin intención criminal, que abrazan un código de comportamiento en el mundo virtual.  
  • Professional criminals y cyberterrorists: son las categorías más peligrosas, tratándose de crackers con elevados conocimientos y especializados en espionaje industrial y operaciones de inteligencia contra gobiernos, agencias de seguridad nacional, etc. 

A la hora de diferenciar y clasificar el perfil de los ciberdelincuentes y, con la influencia de la caracterización que películas y libros han hecho de este tipo de delincuentes, se comete el error de identificarlos como hackers.

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“Un hacker es una persona con grandes habilidades en el manejo de los ordenadores, que investiga un sistema informático para avisar de los fallos y desarrollar técnicas de mejora. Los que utilizan esos conocimientos con fines delictivos, no son hackers, son cibercriminales”, explica Roberto López, Profesor de LISA Institute.

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