Según informaron medios alemanes la semana pasada, el gobierno austriaco está llevando a cabo una investigación a un grupo de altos funcionarios que planeaba establecer un nuevo servicio de Inteligencia en 2018.
En primavera de 2022, se supo que un grupo, liderado por el entonces secretario general en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Austria, Johannes Peterlik, planeaba crear un nuevo servicio de Inteligencia en 2018. El propio Peterlik iba a encabezar el nuevo servicio del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Algunos de los funcionarios que participaron en la planificación de este posible servicio de Inteligencia aún están siendo investigados en Viena, existiendo sospechas de que podría tratarse de un caso de espionaje para Rusia.
En octubre de 2021, Peterlik fue destituido del cargo e, inmediatamente después, se procedió a la apertura de un proceso judicial para investigar el caso. Según informaron medios austriacos en aquel momento, el ex secretario general en el Ministerio de Exteriores transmitió en octubre de 2018 documentos clasificados a un ex agente secreto austriaco, acusado de espionaje en beneficio de Rusia.
La investigación también señala directamente a la ex ministra de asuntos exteriores, Karin Kneissl. Peterlik fue designado por la ex ministra, que permaneció en el puesto desde finales de 2017 hasta mediados de 2019. Kneissl ha sido relacionada con Putin, en 2018 el presidente ruso acudió a su boda y la imagen dio la vuelta al mundo. Según el canal alemán SWR, la investigación sugiere que la ex ministra austriaca conocía los planes para crear un nuevo servicio de Inteligencia.