Descubre las claves del Informe sobre Delincuencia Organizada de INTERPOL 2023. Fundada en 1923, INTERPOL es una red global que coordina la lucha contra el crimen organizado en 196 países. Su informe anual destaca las tendencias delictivas prioritarias a nivel mundial, incluyendo terrorismo, delincuencia organizada de carácter grave, tráfico de drogas, ciberdelincuencia, explotación y abuso sexual de menores en línea, estafas financieras, trata y tráfico de migrantes, y delitos contra el medio ambiente, fundamentando así la asignación estratégica de recursos para combatirlas. Aquí, todo lo que debes saber.
La delincuencia es una actividad camaleónica, que se adapta a su entorno y a las medidas implementadas para combatirla. Sin embargo, organizaciones como la INTERPOL, continúan su lucha contra el crimen organizado a nivel mundial, estudiando las tendencias y amenazas delictivas prioritarias, ofreciendo numerosas respuestas a su naturaleza cambiante para proporcionar un entorno seguro y protegido.
La Organización Internacional de la Policía Criminal (INTERPOL), se fundó en 1923, como una organización intergubernamental dedicada a la cooperación policial de sus, ya, 196 miembros. De este modo, proporciona capacidades esenciales para conectar y coordinar operaciones policiales transfronterizas, demostrando su gran impacto operativo, como la operación Trigger IX, contra el tráfico ilícito de armas de fuego; o la operación Jackal, contra grupos delictivos dedicados a estafas financieras.
Gracias al intercambio y acceso a información sobre delitos y delincuentes proporcionado por sus integrantes, la INTERPOL realiza un informe anual con el fin de establecer una perspectiva general de las tendencias y amenazas delictivas prioritarias a escala mundial, fundamentando la asignación estratégica de recursos y medidas para combatirlas. En el informe recopilatorio de 2023, se recomienda que los países pongan el foco de atención en los ámbitos de: terrorismo, delincuencia organizada de carácter grave, tráfico de drogas, ciberdelincuencia, explotación y abuso sexual de menores en línea, estafas financieras, trata y tráfico de migrantes; y delitos contra el medio ambiente.
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Tendencias del terrorismo
El terrorismo, en todas sus formas, sigue constituyendo una grave amenaza, al ser el tercer delito con mayor frecuencia en las notificaciones rojas de los países miembros. De estas alertas, el mayor porcentaje de publicaciones procedía de países europeos (53%), seguidos de la región de Asia y el Pacífico (28%). Cabe destacar la región africana, al representar el menor porcentaje de notificación (0,5%). No obstante, las comunicaciones aumentan en la región del Norte de África y Próximo Oriente (12%), junto con la región de Américas y el Caribe (7%).
La tendencia general de la actividad terrorista, según el Índice Global de Terrorismo 2023, se basa en la disminución del número total de incidentes, mientras aumenta la sofisticación y letalidad de los atentados. Asimismo, el informe se centra en dos tipos de terrorismo, por un lado, el terrorismo yihadista, conformando una amenaza en África, Norteamérica, Asia y Pacífico, y Europa. Por otro lado, el extremismo de extrema derecha e izquierda, que ve su aumento, generando una preocupación creciente, en las regiones de Europa, América y Oceanía.
En las regiones de África subsahariana y el sur de Asia, se han registrado el mayor número de atentados, al convertirse en los escenarios de disputas entre yihadistas. En el Sahel y el África Oriental, Al Qaeda y el Estado Islámico ponen de manifiesto sus diferencias con una guerra territorial, a través de sus filiales regionales, como Juma’at Nusrat al-Islam wal-Muslimin. Es probable que estas dinámicas se extiendan en otros territorios en los que ahora su presencia ha sido limitada, como en el caso del sur de Asia, donde Al Qaeda y Tehrik e-Taliban Pakistán siguen manteniendo fuertes vínculos con los talibanes, tratando de reducir la presencia del Estado Islámico de la provincia de Jorasán, tal y como se detalla en el informe.
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Como resultado de esta competencia, la población civil no solamente es blanco fácil, sino que se ve obligada a tomar partido por una de las partes enfrentadas, exacerbando el conflicto interétnico y amenazando con extenderse a los territorios cercanos, aumentando la inestabilidad e inseguridad regional. Además, estos grupos siguen muy integrados en los flujos regionales y mundiales de actividades delictivas, como las drogas y minería ilegal.
Europa ha visto un resurgir de grupos, redes e incidentes de militantes de extrema derecha, y aunque sus objetivos siguen siendo variados, convergen en torno al odio de las minorías, los migrantes y los grupos políticos de extrema izquierda, destacando el alcance internacional que muchos grupos han logrado, como Atomwaffen, impulsado por los conflictos en curso, aumento de los flujos migratorios y las narrativas xenófobas, llevando a cabo protestas, adiestramiento en armas de fuego y reuniones privadas entre simpatizantes.
En el extremo opuesto, grupos de extrema izquierda, como Antifa, centran sus atentados en Estados Unidos y Europa, por medio de contramanifestaciones, vandalismo y el uso de explosivos y otras armas de fabricación casera en protesta del extremismo de derechas. No obstante, independientemente del tipo de ideología o motivación, los grupos terroristas siguen incorporando los avances digitales, para aumentar sus comunidades en línea, perfeccionar su modus operandi, y recaudar dinero, con donaciones privadas o plataformas de crowdfunding.
Tendencias de la delincuencia organizada de carácter grave
En este último año, los grupos de delincuencia organizada ven reducido su tamaño, al operar en grupos más pequeños y flexibles, y estar más fragmentados. Sin embargo, esta estructura descentralizada les permite adaptarse rápidamente a la evolución de su entorno y fusionar de forma oportunista redes, recursos e infraestructuras. Asimismo, destacan empresas delictivas a ofrecer servicios, como el blanqueo de capitales o el tráfico de mercancías.
Esta naturaleza oportunista incrementa la violencia ahí donde operan, al alimentarse de los beneficios obtenidos del control de los mercados delictivos y las rutas de tráfico, considerados decisivos para acrecentar su poder y riqueza. De este modo, los grupos delictivos, poderosos, ejercen una gran influencia en las sociedades y economías donde están presentes, teniendo un carácter trasnacional cada vez más acusado, incrementando la importancia de las diásporas, siendo un ejemplo el “Tren de Aragua”.
El tráfico ilícito, documentos falsos, vehículos robados y la diversificación de formas de pago no regulados, facilitan las actividades delictivas, por lo que la INTERPOL hace hincapié en la necesidad de una intensa colaboración, tanto a través de las fronteras como entre los diferentes ámbitos delictivos para frenarlas.
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Tendencias en el tráfico de drogas
Entre los países miembros hay una percepción generalizada de la amenaza que suponen las drogas sintéticas, teniendo la posibilidad de aumentar en los próximos años. Su proliferación, amplía nuevas vías de generar beneficios en delincuentes y organizaciones delictivas, dado que ofrecen varias ventajas como el fácil acceso a los precursores químicos o el menor riesgo de detección. Asimismo, estas drogas suelen ser más potentes y adictivas, por lo que cantidades menores bastarían para satisfacer la demanda de los consumidores, abaratando en costes y disminuyendo riesgos legales.
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En el Informe Mundial sobre las Drogas 2023 de la UNODOC, se especifica que la droga sintética más utilizada a escala mundial es la metanfetamina, específicamente en las regiones del Sudeste y Sudoeste Asiático, Norteamérica y Europa. Otras drogas de interés regional son el fentanilo en Norteamérica y la ketamina en Sudamérica. De este modo, en la Conferencia Intergubernamental de 2022, la INTERPOL reorienta sus esfuerzos en una colaboración más estrecha con las autoridades antidroga de los países miembros en todas las fases de la cadena de suministro, a fin de frenar esta creciente amenaza trasnacional.
Tendencias en la ciberdelincuencia
En el Informe se subraya que la amenaza que suponen estos delitos no se ve reflejada en el bajo número de alertas que reciben, a pesar de posicionarse en el segundo puesto de tendencias delictivas más percibidas. Según la Dirección de Ciberdelincuencia de la INTERPOL, se ha producido un aumento en las ciberamenazas “tradicionales”, caracterizadas por las estafas y robos de datos, viéndose una evolución de los actores y tácticas empleadas, al encontrarse la superficie de ataque en constante expansión.
En concreto, se pone un especial énfasis en los ataques de rasomware, que afecta a las industrias manufactureras e infraestructuras críticas, y que han seguido creciendo en sofisticación, enfoque y sigilo, facilitando la identificación de objetivos más lucrativos y variantes más agresivas; y de phishing, que ve su aumento al establecerse la ciberdelincuencia como servicio, llegándose a utilizar ilegalmente el logo de una marca en estafas un 164% más en 2022.
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Por último, los países miembros manifiestan su preocupación acerca de la posibilidad de implementar los avances en inteligencia artificial para automatizar procesos delictivos o permitir a delincuentes inexpertos perfeccionar sus métodos con códigos maliciosos más convincentes.
Explotación y abuso sexual de menores en línea
En el último año, se ha intensificado la retransmisión en directo de delitos de abusos contra menores, incluido el maltrato infantil. Los delincuentes eligen niños empobrecidos o vulnerables con acceso a internet y dispositivos con cámara web en países con sistemas de transferencia de dinero bien establecidos. A menudo, los abusos son facilitados por una persona conocida de la víctima, realizándose la retransmisión en directo a través de plataformas de comunicación en la web con cifrado de extremo a extremo para no dejar rastro, dificultando la detección por las autoridades policiales y teniendo un carácter trasnacional.
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Esta amenaza, se agudiza para las fuerzas de seguridad, debido a la falta de marcos jurídicos, un predomino de discursos sobre privacidad y protección de datos y de las dificultades para desplegar un soporte tecnológico que permita detectar, investigar y hacer cumplir las leyes de forma adecuada y proactiva en respuesta a estas actividades delictivas. No obstante, se llevan a cabo programas como la creación de la Base de Datos Internacional sobre Explotación Sexual de Niños, que permitió la identificación de 33.000 víctimas en todo el mundo.
Tendencias en estafas financieras
Desde la pandemia del COVID-19, las estafas financieras se han incrementado y mejorado en sofisticación y complejidad. El informe destaca, la tendencia del “pig butchering”, que empieza con una estafa romántica para ganarse la confianza de los objetivos, haciéndose pasar los estafadores por asesores financieros, influenciando a las víctimas para que realicen inversiones reiteradas en cuentas de criptomonedas falsas, antes de sustraerles todos los fondos.
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En 2021, el centro de delitos por Internet del FBI recibió más de 4.300 denuncias relacionadas con este tipo de estafa, con pérdidas declaradas de 429 millones de dólares. Es un complejo fraude financiero que requiere persuasión, perseverancia, conocimientos y apoyo técnico para llevar a cabo planes de inversión y fraudes con criptomonedas a largo plazo.
Tendencias en trata de personas y tráfico de migrantes
La trata de personas es uno de los mercados delictivos más extendidos a escala mundial, al integrar flujos de tráfico trasnacionales más amplios y converger con otras formas de delincuencia, mostrando una gran capacidad de adaptación. Actualmente, hay una tendencia a escala mundial identificada, que abarca la trata de personas con fines de delincuencia forzada, en particular el fraude financiero. De este modo, a través de la operación Storm Makers, la Interpol descubrió una red de trata chin, en la que las víctimas se encontraban en confinamiento y eran obligadas a victimizar a otras personas a través de estafas en línea, obligándolas a crearse cuentas virtuales con el fin de que inviertan en falsos portales de juego, apuestas, loterías y criptomonedas en línea. Estas víctimas también son sometidas a múltiples formas de abuso, como el trato degradante o la explotación sexual, según el informe.
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Tendencias en delitos contra el medio ambiente
En los delitos contra el medio ambiente, los costes de la delincuencia se sitúan muy por detrás del tráfico de armas o personas, en términos de rentabilidad. De este modo, muchas veces están integrados en otras actividades delictivas de manera indirecta, como la utilización extensiva de la tierra para plantaciones relacionadas con la droga.
Asimismo, están correlacionados con la proliferación o prolongación de conflictos armados, al alimentar la competencia por el control de los lucrativos mercados ilícitos y, posteriormente, generar las finanzas necesarias para que los actores no estatales mantengan su participación en los conflictos. Además, el informe sugiere que el cambio climático, al producir catástrofes naturales, aumenta la probabilidad de las migraciones, y en consecuencia, la vulnerabilidad de las personas objeto de tratar. Estas catástrofes naturales obligan a la actuación de las fuerzas del orden, que tendrán que actuar como primeros intervinientes, cada vez con más frecuencia, ampliando sus funciones tradicionales y necesitando de una mejora de la capacidad policial.
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Por consiguiente, la INTERPOL se ha sumado a la Iniciativa Internacional de Aplicación de la Ley para el Clima, como base de su pilar operativo y con el objetivo de apoyar de manera sostenible a sus países miembros en la preparación para los retos que se avecinan relacionados con el clima.
